En la víspera del día de Todos los Santos, se ha popularizado como noche de las brujas o también llamada día de las brujas se celebra la fiesta de halloween, un festejo secular que se ha transformado con las costumbres que nos llegan del otro lado del charco.
Pero esta fiesta, tiene otra singular cara, además de la diversión y es la del incivismo y destrozo de mobiliario urbano que ha dejado en nuestros parques, además de la suciedad un panorama bochornoso y poco ecologista.
A pesar de que existen muchas papeleras junto a los bancos públicos en la que los jóvenes realizan su particular fiesta, el suelo y los propios bancos son utilizados para dejar los restos de botellas, algunas de ellas de vidrio, vasos, bolsas de plásticos, comida y basura en general.
A pesar de que existen muchas papeleras junto a los bancos públicos en la que los jóvenes realizan su particular fiesta, el suelo y los propios bancos son utilizados para dejar los restos de botellas, algunas de ellas de vidrio, vasos, bolsas de plásticos, comida y basura en general.
El parque Abogados de Atocha se ha convertido en algo más que un lugar para el botellón, ha sido el centro del incivismo de algunos, que han aprovechado para destrozar papeleras y utilizar ramas y árboles para su particular diversión aunque también el parque Dolores Ibárruri tiene vestigios de que algunas brujas o brujos muy poco respetuosos con lo público han pasado por allí.
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