Los resultados preliminares del mayor estudio de seroprevalencia de la Covid-19 en Europa, realizado a la población de Torrejón de Ardoz a iniciativa de su Ayuntamiento, apuntan, a falta de los últimos datos y del análisis científico posterior, que entre el 18 y el 22% de los ciudadanos de ese municipio madrileño tienen o han tenido contacto con el virus.
Quien así lo asegura es el director del proyecto, José David Zafrilla, que pese a destacar que los números iniciales de estos test masivos no son «rigurosos» porque faltan aún por «analizar todas las variables», sostiene que esos porcentajes «se van a acercar a los resultados finales», que estima que se conocerán a mediados de este mes.
Desde el pasado viernes y hasta este miércoles, más de 100.000 personas de las 139.000 convocadas -todos los censados salvo los menores de un año-, aproximadamente un 72%, han pasado voluntariamente por alguna de las carpas que el Ayuntamiento de Torrejón, gobernado por el popular Ignacio Vázquez, instaló en el recinto ferial para analizar el impacto del coronavirus en la localidad, una de las zonas 0 de la pandemia en Madrid y en España, según fuentes municipales.
Otros 1.200 vecinos, residentes en centros de mayores o en pisos tutelados, y que no han podido desplazarse, pondrán el punto final este jueves al estudio, que perfila que entre 5.000 y 6.000 ciudadanos del municipio estarían pasando actualmente la enfermedad. La mayoría, aparentemente, jóvenes asintomáticos o con síntomas leves, y todos ellos, ya aislados y citados tras el positivo para una PCR.
Estos datos preliminares arrojan que el virus ha tenido mayor incidencia en la población de esta localidad en otros puntos del país y de la propia comunidad, pues, según la primera oleada del análisis de seroprevalencia que realizó el Gobierno central a una muestra de 60.983 personas, sólo el 5% de los españoles y el 11,3% de los madrileños habían tenido contacto con la Covid-19. Algo que «es normal», según sostiene Zafrilla, y que no depende de la metodología utilizada, que es «similar», sino del espacio y el tiempo.
Antes de empezar, ya «pensábamos que el impacto iba a ser alto», indica el director del estudio. «Uno de los primeros casos de coronavirus del país se detectaron en el Hospital de Torrejón el 27 de febrero, 15 días antes de que decretara el estado de alarma», asegura Zafrilla, y en ese periodo de tiempo «el virus se expandió» ante el «desconocimiento de la población de que debían tomar medidas de seguridad».
RESULTADO FIABLE
Tras realizarse todas las pruebas y para obtener un resultado total fiable, el estudio se someterá a un proceso metodológico que contrastará los datos conocidos con los obtenidos en una muestra aleatoria -elegida por un sistema informático- a la que se le realizará la prueba ELISA. Unos resultados que pasarán a manos de la Comunidad de Madrid, que los incluirá en su análisis propio de la región.
El estudio, que arrancó el pasado viernes tras la validación del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, buscaba como objetivo prioritario minimizar la circulación del virus y conocer la seroprevalencia de uno de los primeros focos y, en un segundo plano, la afectación por grupos de edad o sexo.
Que Torrejón sea «uno de los epicentros de la pandemia», unido a «la concienciación y al miedo» explica, dice Zafrillo, que más un 72% de la población haya acudido a la llamada de esta prueba, un porcentaje de participación superior a las expectativas de Ribera Salud, quien de «forma altruista» ha llevado a cabo el estudio a iniciativa del Consistorio, que ha adquirido los test y montado todo bajo el presupuesto de las fiestas patronales y otros actos suspendidos valorados en dos millones de euros.
Los test rápidos, realizados por sanitarios de toda España de Ribera Salud, quien gestiona el Hospital de Torrejón, proporcionan una fiabilidad del 100% en IgG (que ofrece datos sobre si una persona tiene anticuerpos y ha pasado virus) y del 92% en IgM (que están en el punto agudo de la enfermedad). Los que han dado positivo en este último se encuentran aislados y han sido llamados para someterse a una PCR. A partir de ahora, la sanidad pública se encargará de hacer el seguimiento al enfermo y su red de contactos.
El estudio se ha llevado a cabo en 11 carpas en las que, por la mañana, se realizaban los test, y por la tarde, convertidas en un laboratorio, se analizaban las muestras de sangre. Una logística que ha permitido a los participantes conocer el resultado individual en apenas 10 horas.
La organización de esta iniciativa ha sido impecable,rápido,bien organizado,con sombrillas en las filas para tener sombra, los trabajadores de ribera muy amables y los resultados listos en menos de 5 h. Gracias a todos.
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