Hace mucho tiempo que el paisaje rural y agropecuario del valle del Henares se convirtió en un área metropolitana de ensanche en la zona este de la Comunidad de Madrid. La maquinaria agrícola dio paso, fruto de la industrialización y del éxodo migratorio de los años 60 del siglo pasado, a un paisaje ahíto de chimeneas de fábrica, conexiones viarias y urbanizaciones con una oferta inmobiliaria competitiva. Esta transformación situó al Corredor del Henares como uno de los cinturones industriales con mayor dinamismo del sur de Europa. Un eje económico, fermento del 'Gran Madrid' a través de la autovía A-2, que acaba de dar el pistoletazo de salida a un proyecto que puede suponer un punto de inflexión histórico en su futuro.
La puesta en marcha de Alma Henares, acrónimo de Área Logística Meco Azuqueca, quedó rubricada el pasado martes con la firma del protocolo de colaboración entre los alcaldes de Meco (Madrid) y Azuqueca de Henares (Guadalajara), Pedro Luis Sanz (PP) y José Luis Blanco (PSOE), respectivamente. Se trata de una plataforma de actividades económicas incrustada en la linde entre la Comunidad de Madrid y Castilla-La Mancha. Integra la articulación de un macropolígono de 3,5 millones de metros cuadrados y una revolucionaria oferta de suelo industrial, además de un parque tecnológico y desarrollos residenciales en la vertiente guadalajareña. La inversión prevista, que aportará capital privado, asciende a 1.000 millones de euros. Los promotores esperan poder empezar la urbanización en dos años.
Además de la relevancia técnica y laboral, Alma Henares reviste una indudable dimensión política. Primero, porque elimina el 'efecto frontera' entre Madrid y Castilla-La Mancha en virtud de la cooperación establecida entre consistorios de signo político opuesto: el de Meco, en manos de una coalición entre el PP y Ciudadanos; y el de Azuqueca, gobernado por el PSOE con mayoría absoluta. Y segundo, porque sienta las bases para integrar en el proyecto al resto de municipios que conforman el Corredor del Henares. De hecho, a la firma del convenio entre ambos ayuntamientos asistieron ediles de la práctica totalidad de localidades de esta zona.
OTRA FORMA DE HACER POLÍTICA
"Este proyecto tendrá un impacto importantísimo para todo el Corredor", asegura el alcalde de Meco. Sanz recalca el hecho de que haya partido de dos ayuntamientos gobernados por formaciones adversarias pertenecientes a distintas provincias y comunidades autónomas: "Es otra forma de hacer política, los crecimientos no se pueden hacer de espaldas a otros municipios, sobre todo, limítrofes".
Por su parte, el primer edil de Azuqueca aseguró durante la firma del protocolo de colaboración que "se firma el futuro de la zona para los próximos 50 o 100 años. Es un proyecto tan potente, que la inversión privada está aquí, no hay que buscarla". Asimismo, garantizó la sostenibilidad de la iniciativa y puso de relieve la "excelente situación geográfica" del Corredor del Henares, situado en el eje Madrid-Barcelona y próximo al aeropuerto de la capital.
De los 3,5 millones de metros cuadrados que contempla esta iniciativa, 2,6 millones se localizarán en Meco y el resto en Azuqueca. En todo caso, además del área logística, la superficie de suelos para actividad económica podría llegar a superar los 10 millones de metros cuadrados, el equivalente a más de 1.000 hectáreas.
El alcalde de Meco, a la izquierda, y el de Azuqueca durante la firma del proyecto.
Según Carlos de Gregorio, arquitecto y urbanista encargado de presentar los detalles técnicos del proyecto, Alma Henares "tendrá una configuración en grandes manzanas para dar respuesta a las necesidades de las empresas, además de resolver problemas históricos del entorno como la evacuación de aguas pluviales y residuales, y la mejora de las comunicaciones". Entre las infraestructuras previstas figura el desdoblamiento de la carretera autonómica M-116, desde el enlace con la autovía A-2 hasta el acceso a la radial R-2 y, ya en la parte de Castilla-La Mancha, la conexión de la carretera autonómica CM-1008 -conocida popularmente como 'carretera de la patata'- con la M-116 y la R-2.
Los promotores de Alma Henares tienen en mente convertir esta plataforma -junto a la de Plaza en Zaragoza- en una de las dos mayores superficies económicas de España, lo que tendrá una especial incidencia para la distribución y la logística. El 'boom' de este sector ha provocado que Guadalajara se convierta en la provincia con mayor tasa de actividad de España y en una de las únicas cinco que ha recuperado el empleo perdido en la crisis, según la CEOE. De hecho, solo en esta provincia la logística da empleo a más de 23.000 trabajadores. A ello ha contribuido el establecimiento de algunos de los principales operadores logísticos, como Luís Simões, DHL o XPO, además de los almacenes de Inditex o Primark. El de Amazon también se sitúa en el Corredor, en concreto, en San Fernando de Henares.
"Este proyecto es sinónimo de empleo, de futuro y de inversión y, en la práctica, va a modificar el concepto de superficie logística", subraya Blanco a este periódico. Para Meco, localidad que actualmente tiene 14.305 habitantes, Alma Henares está llamado a ser el catalizador definitivo de su desarrollo, previsto en el Plan General de Ordenación Urbana aprobado en 2009. En el caso de Azuqueca (35.009 habitantes), la iniciativa está llamada a impulsar -según Blanco- la "tercera revolución industrial", en referencia a la llegada de las industrias del vidrio en la década de los 60 del siglo XX y la puesta en marcha de la Zona de Actividades Logísticas en el Puerto Seco en 1996. Ambos hitos sentaron las bases de la transformación no solo del municipio sino de toda su zona.
BONO Y AGUIRRE
Según la EPA, en Guadalajara residen 41.000 personas que trabajan en Madrid. Esta cifra asciende a 58.000 personas en Toledo. Pese a ello, Madrid y Castilla-La Mancha han sido dos autonomías que han protagonizado sonoros desencuentros en asuntos como la transferencia de usuarios en los sistemas públicos de salud de ambas comunidades y, más recientemente, el conflicto de los residuos en la Mancomunidad del Este. En 2003, José Bono y Esperanza Aguirre litigaron cuando el primero pidió a la entonces presidenta madrileña que autorizara la emisión desde Torrespaña de la señal de la televisión regional castellano-manchega, con el fin evitar las zonas de sombras y dar cobertura a toda su comunidad.
La iniciativa que ahora encabezan Meco y Azuqueca acaba de raíz con las suspicacias que siempre han sembrado de minas la raya territorial que separa Madrid de Castilla-La Mancha. Y ello se produce, además, a rebufo de la buena sintonía entre Isabel Díaz Ayuso y Emiliano García-Page, escenificada el pasado diciembre durante la firma de renovación del convenio de abono transporte entre las dos regiones. Este acuerdo expresa el "sentido cooperativo de las comunidades autónomas", afirmó el presidente de la Junta de Castilla-La Mancha. La presidenta madrileña apostilló que las autonomías están "para hacer más país y no para dividir a los ciudadanos en absurdas y falsas fronteras".
Los alcaldes de Meco y Azuqueca aseguran que las máximas autoridades de sus respectivos gobiernos autonómicos "ya conocen y apoyan" el proyecto de Alma Henares. El protocolo de colaboración sellado por ambos consistorios contempla la creación de una comisión paritaria cuya finalidad estriba en "supervisar" las medidas acordadas. Según el primer edil azudense, "se trata de que todos vayamos de la mano. A partir de ahí, las cuatro administraciones públicas, ayuntamientos y autonomías, seremos solo una para garantizar el respaldo a los inversores".
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