Los agentes pararon a un vehículo sospechoso y preguntaron a sus dos ocupantes si llevaban sustancias estupefacientes, a lo que respondieron que sí.
A continuación les mostraron una especie de pelota de papel de aluminio con tres bolsas con cocaína y heroína en su interior, en total ocho gramos. El copiloto que sacó la droga aseguró que fue el conductor quien lo había comprado todo en la Cañada Real. Por ello, ambos individuos fueron detenidos por un delito contra la salud pública.
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