El Gobierno regional continúa dando pasos para construir la planta de tratamiento de basuras en Loeches, que genera un fuerte rechazo entre los vecinos. De momento, ha iniciado el procedimiento para llevar a cabo las expropiaciones de los terrenos. La infraestructura corre prisa porque el vertedero de Alcalá de Henares, donde se acumulan a cielo abierto los desperdicios que generan 650.000 vecinos del este de Madrid, se colmatará a finales de 2018. Medio Ambiente anunció ayer ayudas de 300 millones hasta 2014 a las mancomunidades que gestionan la recogida de basura para paliar los déficits de la red actual.
La Consejería de Medio Ambiente ha puesto en marcha el proceso de expropiación, a pesar de que todavía hay un procedimiento contencioso administrativo en marcha. El Ayuntamiento de Loeches, gobernado por el PP, ha recurrido en casación la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) de archivar su denuncia contra el acuerdo del Gobierno regional de 2016 que aprobó el plan especial que permite la construcción del complejo.
La planta recibirá los desperdicios de unas 650.000 personas de 31 municipios del este de la región, entre ellos algunos tan importantes como Alcalá (203.000 habitantes), Torrejón de Ardoz (125.000) o Coslada (91.000).
La Consejería de Medio Ambiente justifica la expropiación por la necesidad de "obtener dichos terrenos para la ejecución de las obras del complejo medioambiental". El procedimiento afecta a 53 parcelas (14 de ellas de dominio público). La superficie total es de 629.451,45 metros cuadrados, de los que se comprarán 523.257,46. El resto corresponde a terrenos públicos.
Las normas de ordenación urbana del municipio clasifican el suelo donde se situará la planta como "suelo no urbanizable de protección especial del espacio rural y la urbanización y no urbanizable de protección especial de vías pecuarias”.
El complejo de Loeches se convirtió ayer en uno de los protagonistas de la presentación de una inversión de 300 millones para mejorar las infraestructuras de gestión de las basuras, anunciada por el consejero de Medio Ambiente Pedro Rollán. La Mancomunidad del Este será la primera que reciba fondos, por la urgencia de la situación con su vertedero próximo a cerrar y el que le tiene que sustituir (Loeches) a la espera. “Es una situación acuciante”, comentó el consejero
El gasto anunciado por la Comunidad se dirigirá a subvencionará el 50% del coste de las nuevas instalaciones hasta un máximo de 76 euros por habitante. Se espera poder cumplir así con el objetivo de alcanzar el 50% de reciclaje. En la actualidad, entre el 70 y 80% de la basura se tira directamente a un vertedero.
Rollán admite que es necesario dar un giro a la política seguida hasta ahora. El Plan Regional de Residuos Urbanos (2006-2016) no ha conseguido mejorar el ratio de recuperación, que ha pasado del 15% al 16%. El director general de Medio Ambiente, Diego Sanjuanbenito, mantiene que la falta de financiación fue uno de los mayores problemas, que ahora se intenta solventar.
Otra cuestión es en qué tipo de instalaciones se está pensando. La competencia es de las mancomunidades que tendrán que concretar sus planes. El presidente de la Mancomunidad del Este y alcalde de Alcalá de Henares, Javier Rodríguez Palacios, sostiene que su solución pasa, de forma inmediata, por construir Loeches. También se pensará en la posibilidad de ofrecer a los vecinos el contenedor de tapa marrón para los restos de comida o de jardinería doméstica.
David Lucas, alcalde de Móstoles y presidente de la Mancomunidad del Sur, que agrupa a 70 municipios y casi dos millones de personas, indicó ayer que todavía no han concretado sus necesidades. Aún así, apuestan por procedimientos mecánico-biológicos, más sostenibles que la incineración. Todavía están estudiando propuestas, pero piensa que serán necesarias dos plantas de tratamiento de basuras en el sur.
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