El reparto de las mascarillas gratuitas que se han comenzado a distribuir entre la población de Madrid desde este lunes ha generado largas colas en las farmacias de la región. Pese a que los madrileños cuentan con 15 días para recoger una unidad de calidad FFP2 en cualquiera de los 3.000 locales que hay en toda la comunidad, algunos han hecho cola incluso antes de que los locales abrieran sus puertas. El sistema informático, ralentizado ante la oleada de usuarios, ha llegado a colapsar en un momento puntual en algunas de ellas.
Una vecina de Puente de Vallecas comentó a este diario que a primera hora de la mañana estuvo una hora esperando para poder recoger una de estas mascarillas, que se dispensan con la tarjeta sanitaria - DNI o NIE en su defecto- y que vienen protegidas por un plástico que porta el escudo de la Comunidad de Madrid y el eslogan #Adelantemadrid.
Y a mediodía, en el Paseo de Extremadura, unas 12 personas aguardaban a las puertas de otra farmacia para lograr una. "Pues fíjate, yo esperaba que hubiera más gente en la cola", ha asegurado una cliente de este comercio, donde la gente se presentó antes de que sus propietarios abrieran.
"Tenemos más de 20 personas esperando y así ha estado todo el día. Estamos saturadas. Hay más colas aquí que en el supermercado. Esta mañana hemos tenido un poco de colapso porque se ha caído el sistema informático [del Servicio Madrileño de Salud], han indicado a primera hora de la tarde desde una farmacia de la calle Pablo Neruda.
En la misma línea se expresaba otra farmaceútica de Usera: "Hemos tenido mucha gente y colapso. Hemos llegado a tener una cola de 50-60 personas que daba la vuelta a la manzana. Hay gente que viene con ocho tarjetas. El sistema ha ido muy lento y hemos llegado a tardar 10 minutos en dar sólo una mascarilla".
La Comunidad de Madrid ha asegurado que no le consta que haya habido un problema generalizado en el sistema pero no han descartado que se haya ralentizado porque ha habido "mucha demanda". Hasta las 14.00 horas, se habían dispensado cerca de 500.000 y, a las 19.30, se había superado el millón.
En el barrio de Lavapiés, otra farmacéutica ha expresado a EL MUNDO vía telefónica que han tenido colas constantes de entre 20 y 30 personas y que a primera hora tenían gente esperando antes de abrir. "La verdad es que esperaba que fuera peor, aunque podrían haberlo hecho mejor, un reparto por apellidos, o algo así", ha señalado. Además, ha relatado el problema que tienen con la gente sin papeles que hay en la zona. "Esa gente no tiene derecho a mascarilla, pero si no se protege a esas personas, tampoco nos estamos protegiendo nosotros", ha añadido.
En la periferia la situación fue similar. En un local de Colmenarejo, por ejemplo, se formaron filas de más de 30 personas desde primera hora de la mañana y eso que algunas personas llevaban las cartillas sanitarias de sus familiares para poder retirar el equipo de protección. "¿Esta cola tan grande es para comprar una mascarilla?", ha señalado una de las personas al ver a tanta gente aguardando para retirarlas.
Para intentar agilizar la retirada, los empleados de la farmacia han habilitado un mostrador y han salido a la calle para decir a los congregados que quien solo fuese a por la protección que pasase al interior. "Es un ahorro esto de la mascarilla gratis, hace tres semanas ésta misma me costó nueve euros y no voy a desaprovechar el regalo", comentaba una mujer. Al mismo tiempo, los clientes preguntaban si se podía reutilizar las mascarilla y si se podía lavar una vez empleada.
En una farmacia de Leganés han estado "toda la mañana sin parar" y en otra de Colmenar tuvieron que reforzar el personal ante la oleada de gente. "Tenemos tres puestos de venta y todo el tiempo hemos tenido entre 5 o 6 personas esperando fuera", ha señalado la farmacéutica de este municipio.
SITUACIÓN DE NORMALIDAD Y ALGUNA ANÉCDOTA
El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM), sin embargo, ha expresado que la situación generalizada que se ha vivido esta mañana en la capital es de normalidad. "Hay entre dos o tres personas esperando en la calle y en algunas farmacias, una o ninguna", ha indicado a EL MUNDO su presidente, Luis González, mientras circulaba por el centro de la capital a mediodía para ver con sus propios ojos cómo se estaba discurriendo la jornada.
"La ciudadanía se está comportando ejemplarmente, porque tiene 15 días para recogerla", ha apuntado el farmacéutico, que ha tildado de anécdota la situación que ha vivido esta mañana en su propio local: "Una mujer estaba en la puerta a las 8.30. Le hemos comentado que no abríamos hasta las 9.30, pero quería esperar. Le hemos dicho que se quedase tranquila, que no se iba a quedar sin su mascarilla".
Lo cierto es que las farmacias de Urgencias han dispensado 3.000 mascarillas sólo esta noche -el reparto comenzó a las 00.00 horas de este lunes-, según ha comentado el presidente del COFM, quien ha añadido que "algunos han aprovechado para recogerla antes de irse a trabajar".
"En algunas puede parecer que hay mucha gente, pero no. Por la distancia de seguridad, tienen que esperar fuera. Y hay que tener en cuenta que es lunes y habrá mucha gente recogiendo su medicación habitual", ha indicado González, quien ha manifestado repetidamente su agradecimiento con todos los farmacéuticos por la labor que están llevando a cabo y a la ciudadanía por su colaboración en la recogida.
14 MILLONES DE MASCARILLAS
Las farmacias de toda la región dispensarán en los próximos 15 días los 14 millones de mascarillas que el Gobierno de la Comunidad de Madrid ha adquirido en el mercado chino. Desde el viernes, cuatro aviones han llegado desde el país asiático con la mitad del material material, que no ha librado las críticas.
Los jefes de servicio o responsables de medicina preventiva en una quincena de hospitales de Madrid han enviado una carta a la Comunidad de Madrid en la que piden que no se repartan mascarillas FFP2 y sí quirúrgicas para la población general, ya que las de alta protección están indicadas para los trabajadores sanitarios y pueden provocar mayores riesgos en la ciudadanía.
"Su uso continuado dificulta la respiración, es incómodo, y en determinadas personas, no tolerable. Su utilización en población general favorecerá que las personas se toquen más frecuentemente la cara y se quiten la mascarilla al no poder respirar cómodamente favoreciendo el riesgo de contagio", han indicado los profesionales.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha defendido este lunes el reparto de las FFP2 entre los madrileños porque protegen "en exceso" dado que, evita no sólo que se propague el virus sino también que la persona que la lleve contagie. Asimismo, ha indicado que para los profesionales sanitarios "no han faltado ni van a faltar" porque han estado comprando "toneladas de material".
La líder del Gobierno de Madrid ha comentado que quiere "lo mejor para los ciudadanos" y que estas mascarillas tienen un uso de 48 horas consecutivas, por lo que pueden durar "tres, cuatro o cinco días".
0 comentarios:
Publicar un comentario