El Parque de Bomberos de Arganda y el Parque Regional del Sureste han acogido un curso de formación especializada en técnicas de rescate de aguas rápidas que se desarrollará hasta el 22 de noviembre.
El curso se imparte en el Parque de Bomberos de Arganda y en el Parque Regional del Sureste (Foto: Laura del Campo) |
El Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid ha recibido un curso de formación especializada en técnicas de rescate en aguas rápidas en el Parque de Bomberos de Arganda del Rey y en el Parque Regional del Sureste. Concretamente, han sido 1.300 bomberos, procedentes de los 19 parques de la región, los que han asistido a este curso de salvamento acuático, que se ha desarrollado durante los meses de septiembre y octubre y que continúa hasta el 22 de noviembre. “Se trata de un reciclaje de plantilla. Nosotros damos clase de lunes a viernes. Los bomberos de cada turno de cada parque vienen un día y asisten a dos horas de formación teórica y tres horas de práctica”, indicó a Este de Madrid Juan Porta, instructor del Servicio de Formación del área de rescate acuático.
La formación de este tipo de rescates se ha estructurado asociando a cada uno de los parques regionales un nivel distinto. Existen tres niveles diferentes: en el primero; se encuentran los parques con equipaciones completas y un vehículo ligero, es decir, un mínimo de material para acometer un rescate rápido; el segundo nivel se ha determinado en aquellos centros donde ya existe este material y además se añade una embarcación hinchable. El tercer nivel, en el que se encuentra el Parque de Bomberos de Arganda, tiene la anterior equipación duplicada, así como embarcación de remo al rescate y embarcación a motor. Sin embargo, durante el curso destinado a todos los bomberos de la Comunidad de Madrid, la instrucción en Arganda se imparte a los tres niveles. En la actualidad, solo quedan cinco parques agrupados en torno al máximo nivel.
Un medio natural idóneo
El entorno elegido para formar a los profesionales adquiere un protagonismo especial. Mientras las sesiones teóricas se imparten en las instalaciones de Arganda, las técnicas y habilidades prácticas se enseñan en el Parque Regional del Sureste. Concretamente, se ha elegido un tramo del río Jarama próximo a las Lagunas del Campillo. Se trata de una zona específicamente estrechada por la Confederación Hidrográfica del Tajo para medir caudal y velocidad, entre otras características. “Cuando estrechas un cauce de agua, aumenta la velocidad, porque el mismo volumen de agua tiene que pasar por un sitio más estrecho. Entonces se acelera. Nosotros lo aprovechamos para dar la formación”, detalló Porta. Por esa razón las diversas maniobras, como las técnicas de nado ofensivo y defensivo y sistemas de rescate eficaz, se enseñan en el Parque Regional del Sureste, un medio natural idóneo en el que se dan óptimas condiciones durante todo el año para las aguas vivas.
El grupo especializado en rescate acuático de toda la región madrileña lleva trabajando tres años en este tipo de cursos de formación, con el objetivo de dotar de recursos a todos los parques de la Comunidad, para que puedan ofrecer una respuesta eficiente en los casos donde sea necesario. Para ello, se utiliza material y equipaciones completamente nuevas. Según el instructor del área de rescate acuático, la equipación personal y las embarcaciones son nuevas: de esta manera, los bomberos formados aprenden, por un lado, cómo es un río y los riesgos que puede haber en una calle inundada y, por otro, conocen la manera de manejar y utilizar todo ese nuevo material del cual se les dota.
El Parque de Bomberos de Arganda
El nacimiento del Parque de Bomberos de Arganda del Rey está directamente ligado a las instalaciones que tenía la antigua Dirección Provincial de Madrid en la zona del Puente del Jarama. El jefe del parque de Arganda, Fernando Antón, destaca cómo los terrenos situados a ambos márgenes del río Jarama pertenecieron a lo que fue el Departamento de Agricultura de dicha diputación. Para actuar ante los incendios forestales y de vegetación, el Departamento de gestión agrícola “creó unidades en los parques, en lo que eran antiguos viveros que parten de la gestión natural que tenía la diputación. Así crearon el de Arganda del Rey, Villaviciosa de Odón, Las Rozas y Alcobendas”, apuntó Antón.
Esto sucedió hacia el año 1980. A partir de entonces, en la localidad que venimos tratando se creó “una nueva construcción a la que se empieza a dotar de medios materiales y personales”. Durante los siguientes tres o cuatro años, el servicio fue prestado por el personal del vivero del medio natural de la diputación. Para ello, utilizaban vehículos autobombas contra incendios, empleados sobre todo en el medio natural.
El surgimiento de estas instalaciones también está ligado a la transformación de la organización estatal, con la creación del Estado de las Autonomías y, por lo tanto, del inicio de la Comunidad de Madrid como ente. El Cuerpo de Bomberos de la región surgió como órgano independiente hace 52 años, es decir, data de 1967.
Por otro lado, es interesante destacar que las instalaciones del Parque de Bomberos de Arganda, tal y como las conocemos en la actualidad, se inauguraron en el año 1999. Está ubicado en la zona este de la región, en el kilómetro 22 de la A-3. Su ámbito de “primera intervención” es considerablemente amplio, ya que abarca, por el norte, a Velilla de San Antón, Loeches, Campo Real y Nuevo Baztán; hacia el sur, llega a Morata de Tajuña y San Martín de la Vega; por el este, incluye a Estremera, Brea de Tajo y Fuentidueña de Tajo, el último municipio de intervención, antes de llegar a la provincia de Cuenca; y hacia el oeste, interviene en Rivas Vaciamadrid y parte de la Cañada Real, donde se establece el límite a partir del cual actúan los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid. La extensión de esta zona puede verse modificada cuando se ponga en marcha el proyecto de construcción de un parque de bomberos en Villarejo de Salvanés. No obstante, los recursos son intercambiables y pueden movilizarse a cualquier punto de la Comunidad de Madrid, por necesidades de emergencia.
En la actualidad, el parque está dotado con 74 bomberos, organizados en diferentes turnos de doce personas en cada uno de ellos. Con una prestación del servicio de 24 horas, los bomberos de Arganda trabajan día y noche para llevar a cabo diferentes funciones, entre las que destaca el atender tanto fuegos urbanos como forestales. “Ahora trabajamos más incendios urbanos e industriales que incendios naturales”, señaló el jefe del parque argandeño. Durante las dos riadas que sufrió el municipio el pasado 26 de agosto y el 15 de septiembre, fue necesaria la actuación de más personal para atender a la ciudadanía afectada por las inundaciones.
0 comentarios:
Publicar un comentario