Mal verano para la violencia de género, una vez más los vecinos de San Fernando de Henares salen a las calles del centro urbano para manifestar su consternación por el asesinato de una mujer en Barcelona y otra en Girona, ambos asesinatos a manos de sus hijos, dos feminicidios intrafamiliares que llenan de dolor a la gran familia feminista.
La manifestación se desarrolló por el recorrido habitual desde el ayuntamiento hasta la plaza de Fernando VI.
Nunca los constructores de la Real Fábrica de Paños, ni los fundadores del Hospicio de San Fernando que soportaron un 8 de marzo la Revuelta de mujeres, ni siquiera la reina Isabel II, donante de la estatua de Fernando VI en 1844 podrían imaginar que ambos monumentos tendrían tanto protagonismo en la lucha por los derechos de las mujeres.
En la plaza de Fernando VI, Cati Rodríguez alcaldesa de San Fernando de Henares leyó un manifiesto de repulsa y se guardó un minuto de silencio.
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