A raíz de un comunicado interno de los sindicatos en el que se vertían acusaciones contra el equipo de gobierno y se acusaba a un familiar de la concejala de cultura de realizar labores propias de una funcionaria, la oposición solicitó una Comisión Informativa para que se diesen las explicaciones oportunas.
Se realizó esa comisión y la Concejala de Cultura, Dona Galán explicó el malentendido y las informaciones erróneas de ese comunicado. Algunos corporativos no quedaron conformes con esas explicaciones, otros sí, y aquellos solicitaron un pleno extraordinario para que esas explicaciones fuesen públicas.
Se aprovechó esa solicitud para la ampliación de información de otras áreas. La alcaldesa Cati Rodríguez, concedió la petición de un pleno extraordinario que convocó al día siguiente del pleno ordinario. La concejala de cultura solo había preparado la información relativa al motivo del comunicado, del resto de los temas invitó a los corporativos a que lo solicitasen y les remitiría la información por escrito.
Para muchos vecinos es difícil de entender esta falta de comunicación entre el equipo de gobierno y la oposición y viceversa, incluso algunos corporativos no entendían la necesidad de este pleno, así lo expresaron en el transcurso del mismo, que tiene un coste aproximado de 2.000 euros y aportó poco contenido.
Realizar un pleno extraordinario que duró una hora y cuarto, cuando el día anterior hubo otro pleno ordinario que finalizó relativamente pronto y nadie preguntó nada ¿Es un despilfarro?
Tres cuartas partes del tiempo que duró el pleno extraordinario tuvo más un carácter propio de los tiempos que vivimos, de precampaña electoral, que de profundidad en los temas que preocupan realmente a los vecinos.
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