El 11 de abril de 2016, Jaime González Taboada, consejero de Medio Ambiente, Administración local y Ordenación del territorio presentaba en San Fernando de Henares, la remodelación del parque Dolores Ibárruri. Ese mismo día durante el acto de apertura algunos vecinos que accedían desde la Avenida de Irún al parque, lo hacían pisando las plantas del seto triangular recién plantado, al que no habían puesto valla metálica protectora.
Unos meses después lo que era una zona de plantas se habían convertido en un camino utilizado por una gran mayoría de vecinos que elegían la línea recta como tramo más corto, sin importarle el aplastamiento de las nuevas plantas.
Dos años y medio después de su remodelación y aprovechando las obras en la avenida de Irún, el Ayuntamiento de San Fernando de Henares ha construido una rampa.
En una época en la que la accesibilidad adquiere vital importancia en la ciudad moderna, los técnicos no han tenido en cuenta el escalón de 2 o 3 cms. que han dejado en uno de los lados de esa rampa, pero no sólo eso, una farola enmedio de la vía representa un obstáculo a los viandantes con gran riesgo de accidentes.
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