El cine de verano es una propuesta arriesgada en la era digital en la que el cine está en nuestras casas a través de internet o en los móviles y es tan grande la oferta, que las películas se han visto más de una vez, pero esto no es obstáculo para que los vecinos del municipio acudan en familia a la plaza de España en una noche de verano, en la que el calor invita a salir de casa.
Entre los objetivos de
esta iniciativa está el de diversificar la oferta cultural y atender a los
intereses de los distintos sectores de población, así como el de potenciar el
interés de esta actividad como una alternativa de ocio cultural, familiar y
colectiva, a la vez que se recuperan los espacios al aire libre de proyección
de las películas como lugares de encuentro y comunicación tan característicos
de la cultura mediterránea.
Sólo había 200
sillas, por lo que algunos vecinos se llevaron su propios asientos de casa,
otros se sentaban en el suelo o en los bancos alrededor de la plaza.
Entre algunos de los
inconvenientes la falta de luz al finalizar la proyección, el trasiego de
personas durante la proyección, o la escasez de butacas para tanto público,
entre las ventajas destacar el sonido, luminosidad y grandiosidad de la
pantalla de proyección.
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